COMO AGUA PARA CHOCOLATE / Laura Esquivel

Por fin echa a andar este curso nuestro club de lectura, aunque con nueva ubicación, antes nos reuníamos los jueves  en el colegio, y ahora lo hacemos los martes en la Biblioteca Pública; y empezamos con esta "deliciosa" novela de realismo mágico.

Tita y Pedro se aman. Pero ella está condenada a permanecer soltera, cuidando a su madre hasta que ésta muera, y Pedro, para estar cerca de Tita, se casa con la hermana de ella, Rosaura. Las recetas de cocina que Tita elabora puntean el paso de las estaciones de su vida, siempre marcada por la presente ausencia de Pedro. Y la acompañan en su apoteosis y en su tránsito a una sabrosa, muy sabrosa eternidad.

Esta novela de Laura Esquivel trata sobre una antigua costumbre familiar en la que a la hija más pequeña no se le permite casarse, (ya que debe hacerse cargo de su madre hasta la muerte), pero ella hace hasta lo imposible por luchar contra esa horrible tradición, todo ello "aderezado" con un toque de magia y superstición.

El libro se presenta de una forma muy original, capitulado a través de la preparación de unas recetas dejadas por Tita para la posteridad, y recordando los días en los que habían sido preparados expresando diferentes situaciones y estados. Tratándose de una amante de la cocina, Laura Esquivel nos muestra que el arte culinario no es simplemente una actividad cotidiana para cumplir una necesidad básica sino, por el contrario, tiene miles de características especiales, perfectamente representadas en la obra. De este modo, la cocina es liberadora, pacificadora, y hasta un vínculo de comunicación y amoroso entre los personajes.
Según la autora, "UNO ES LO QUE COME, con quién lo come y cómo lo come", y así, en su novela nos descubre la efervescencia amorosa que surge tras degustar codornices con pétalos de rosa o el poder de recobrar la memoria que puede tener un caldo de colita de res.

Esta historia de amor solo se puede entender si nos situamos en el contexto. La obra relata las historias vividas por una familia durante un turbulento período de la historia, la Revolución Mexicana, y se sitúa en  Río Grande, exactamente en un pueblo fronterizo llamado Piedras Negras. Y por supuesto no debemos olvidar el "Manual de Carreño", que tantas veces se nombra en este libro, por el que se rigen las vidas de esta familia; manual de urbanidad y de las buenas maneras, en el que se recogen las formas más elementales y las reglas sobre los buenos modales para relacionarse en sociedad y que, durante mucho tiempo, fue declarada en diversos países hispanoamericanos libro de texto para las escuelas públicas. Y, por si alguien tiene alguna curiosidad en ojear esta anticuada obra os dejo un enlace para que le echéis un vistazo http://200.21.193.162:81/pub/familia/manualcarreno.pdf

Se lee rápido, gracias a la utilización de un lenguaje cotidiano y muy expresivo a través del cual comprendemos exactamente el conjunto de sensaciones que experimentan los personajes, cuyo verdadero conflicto, presente en todos ellos, es la frustración hacia el amor, que viene siempre impuesta por Mamá Elena (Bernarda Alba a la mexicana): la forzada separación de Tita y Pedro, el asesinato (previa separación) de Elena con Treviño, el impedimento de ejercer el acto de amor por parte de Gertrudis, el matrimonio sólo por aspectos de Rosaura y Pedro, la separación de Nacha y su novio, el enamoramiento y abandono que sufre John Brown, la lucha por ganar el amor de Luz Del Amanecer y, finalmente, la violación de Chencha y su posterior encuentro con el verdadero amor. En cada historia aparece la lucha, la desesperación por ganarse en tiempos de represión, la libertad para ejercer lo más íntimo y sagrado que puede tener un ser humano, que es su derecho a amar a alguien, y a ser amado.
Cada personaje, desde su perspectiva, se relaciona con este conflicto, siendo el principal exponente del mismo en la novela la serie de desencuentros forzados de los que son víctimas Pedro y Tita, en manos de Mamá Elena.

Las alusiones al mundo de la gastronomía para describir el caracter o los sentimientos de los personajes son contínuas, por ejemplo: estar como agua para chocolate, o como un buñuelo al entrar en aceite hirviendo, para describir a Tita; o también como agua en aceite hirviendo para mostrar la relación entre Tita y su hermana Rosaura; pero me quedo con esta frase para recordar esta novela:
"Gertrudis cerraba los ojos cada vez que daba un sorbo a la taza de chocolate que tenía frente a ella. La vida sería mucho más agradable si uno pudiera llevarse a donde quiera que fuera los sabores y los olores de la casa materna."




Si os animáis a leerlo pinchad aquí: LEER Como Agua para Chocolate

Alfonso Arau, marido de la autora, rodó la película en 1992 con el guión de la misma escritora, que fue traducida a mas de treinta idiomas y fue galardonada con el premio ABBY ( American Brookseller Book of the Year) galardón que por primera vez fue concedido a un escritor extranjero. La película tuvo tanto éxito que fue nominada para el Goya en 1993.